CG vino a comer a casa con dos regalos una botella del 78 (que cayó sigilosamente) y una idea poderosa: cada vez nos cuesta más saborear el presente. Parte de la insatisfacción permanente de las personas está fundamentada en esa permanente insatisfacción que abunda a los codiciosos (puede que la enfermedad esencial del capitalismo).
El principio lo fundamentaba en un libro de filosofía oriental (que no me quiso revelar) que detallaba que cada vez enfocamos más tiempo a encarar un futuro mejor en base a nuestro aprendizaje del pasado, olvidándonos de disfrutar nuestro presente/realidad actual para conseguir mejoras futuras. Justo lo contrario de lo que hace un niño incapaz de renunciar a un premio presente y esperar al futuro por un premio mejor por grande que sea.
Gran idea sin duda la que me trasladaba que se veía interrumpida por mensajitos que iba recibiendo avisándome de los goles de mi equipo de futbol… que paradoja. El fútbol no nos deja ver las ideas. Me hizo pensar que no es tan incierto lo que dice.
Lo leí recientemente: "El ayer es historia, el mañana es un misterio, el hoy es un regalo...por eso se le llama presente".
ResponderEliminarQue orgullo de amigos, me encanta lo escrito por ambos. Alguiene habla del libro "una llamada al amor del teólogo "Anthony de Mello" buscarlo online vale la pena 50 páginas sobre la necesidad de poseer a lo q dedicamos gran parte de nuestro presente, pasado y futuro
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