martes, 25 de noviembre de 2008

Memorandum interno - Colaboración y competencia

A: Directores de Area /Departamento
DE: Dirección

ASUNTO: Colaboración y competencia

El 2009 será el año más complejo de la historia. Nos enfrentamos a un periodo que debemos abordar con un máximo nivel de competitividad en el mercado. Me gustaría hacer una reflexión al respecto de la competitividad y la competencia inspirada en un pensamiento del Sr. Martinez.

La palabra 'ilunga', que en congoleño significa "una persona preparada para perdonar un primer abuso, que tolera un segundo pero nunca un tercero” fue elegida en un congreso la más difícil de traducir al resto de idiomas.

No es raro que este concepto sea difícilmente traducible ya que con mentalidad occidental, este comportamiento nos resultará extraño. Vivimos en una sociedad rebañada de capitalismo basado en la Ley del Talion (Ojo por ojo y diente por diente). No estamos dispuestos a invertir/colaborar en la otra parte en pro de mejorar el resultado. Si compiten con nosotros competimos y si colaboran, colaboramos. Vamos que en eso los occidentales somos sencillitos “Si nos traicionan, penalizamos”.

Este pensamiento base de la dinámica competitiva fue modelizado en teoría de juegos mediante el dilema del prisionero que desmenuza las alternativas colaboración-competencia en un entorno cerrado.

Lo interesante radica en plantear la dinámica de este tipo de relaciones simétricas a lo largo del tiempo. Esto es especialmente importante cuando dirigimos a un equipo de personas y tenemos la obligación de ser el eje del desarrollo de la gente que nos rodea, no el sustento de sus limitaciones.

Esta tarde terminaba un intenso día con esta reflexión a un colaborador o ¿era un competidor? Afortunadamente descubrimos hablando como personas sensatas lo que los congoleños y la dinámica competitiva tiene muy claro:

Ilunga, la palabra más compleja de traducir del mundo, sintetiza la mejor estrategia del mundo: Colaborar y competir pero con capacidad de perdón.

Afectuosamente.

1 comentario:

  1. Me temo que no soy un "ilunga". Hay un proverbio árabe - o chino, no sé, con los proverbios nunca puedes estar seguro del todo-, que dice: "La primera vez que me engañes, será culpa tuya; la segunda, será culpa mía".

    Me gustan más los matices de este pensamiento que los del "ilunga".

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