miércoles, 16 de enero de 2008

Están locos estos romanos...


Hemos desayunado con la noticia de que la exclusión de Gallardón de las listas del PP es un signo del liderazgo de Rajoy. ¿?
Yo no es que sea especialmente “gallardonista” ni “pepero” pero como simple ciudadano cuando menos me sorprende la decisión de no contar con el político mejor valorado (dos puntos por encima de Rajoy y Aguirre) en un momento decisivo. Llevado a otros términos, no identificaría como un especial signo de liderazgo que el ¿prestigioso? Luis Aragonés dejase fuera de una convocatoria a Bojan, que Ferrán Adriá permitiese que el mejor postre se quedase fuera de su menú para que no enmascarase a los platos principales o que pensaríamos de un maestro que excluye al niño listo de la clase y no fomentas su desarrollo. Resulta curioso el juego político…, hace algún tiempo incluso pensé que en un futuro podría dedicarme a ello pero me parece que no tengo ese “liderazgo” necesario. ¡Menos mal!


Por cierto ¡¡¡¡Listas abiertas ya!!!!!

2 comentarios:

  1. pepeEn el PP hay por lo menos dos cosas evidentes: Alberto Ruiz-Gallardón está loco por ir en las listas electorales de Madrid y Mariano Rajoy le está haciendo sudar la camiseta en la banda. ¿Por qué este asunto es un foco de atención? La respuesta es muy sencilla: Ruiz-Gallardón es un " pringao como diria mi amigo kiko" que centraría el partido, ampliando su base electoral y acercándolo a la victoria. Pero al mismo tiempo es una amenaza para el liderazgo con tembloroso de Mariano Rajoy, que si perdiera las elecciones, se iria a la mierda. De esta situación se pueden ver también otras conclusiones que no por sabidas resulta menos interesante recordar. El liderazgo, en los partidos, es fundamentalista porque se basa en el poder ilimitado del líder . Los creyentes de cada religión política se limitan a asentir cada actuación del jefe. Eso sucede hasta que la derrota le hace sustituible.
    La vieja guardia de José María Aznar sigue marcando los ritmos y los tiempos. Aznar sigue mandando porque no perdió formalmente las elecciones del 2004. Supo retirarse antes de la debacle y además maneja la caja del dinero desde la fundación que se hizo a su medida cuando aún estaba en el poder.
    En cada ocasión en la que Mariano Rajoy ha querido hacer un distanciamiento de las viejas políticas de crispación, ha aparecido Aznar para recordar el catecismo que él implantó. Luego, Ángel Acebes y Eduardo Zaplana hacen el resto. Así no hay quien gane unas elecciones.
    A Ruiz-Gallardón le puede ocurrir que se convierta en una eterna promesa que nunca se materializa. Su prudencia le dicta que tiene que esperar a que el tiempo haga su trabajo.

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  2. Querido Kele, me gusta sobremanera tu blog y que poco nos vemos. Considero que Rajoy se ha sucidado políticamente, no soy un Gurú de la política (eso ni existe)pero veo que pierde las elecciones, la paradoja es que si las pierde le puede beneficiar a Gallardon, que ahora aparece fuera del tinglao, como dice pepe (Pepito?) Rajoy sigue comandando el partido bajo la batuta de Aznar (o era Ansar?)y eso no es bueno para el PP, por cierto yo tambien me he decidido con esto de los blogs. Un abrazo.

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